Transhumanismo: Introducción

 Transhumanismo

 

“¿Puede alguien imaginar un reto científico más apasionante que burlar la muerte… o un mercado más prometedor que el de la eterna juventud? Si tiene más de cuarenta años, cierre el lector los ojos durante un minuto e intente recordar el cuerpo que tenía a los veinticinco. No solo el aspecto que tenía, sino, sobre todo, como se sentía. Si pudiera recuperar aquel cuerpo ¿cuánto estaría dispuesto a pagar por ello? No hay duda que algunas personas renunciarían de buen grado a esta oportunidad, pero habría suficientes clientes que pagarían lo que fuera por ella y que constituiría un mercado casi infinito”. 

 

(N.Y. Harari. "Homo Deus")

 
Ex Machina

Al desgastar las páginas del libro de Harari, veo enormes frases muy cercanas, casi propias del “Transhumanimo” (H+). No lo menciona en ninguna parte de su libro y no podría afirmar que él sea seguidor o profeta transhumano, pero sí son muy propias de esta visión del mundo, del hombre y su relación con la tecnología.

A mí me gustaba jugar fútbol, de jovencillo lo practicaba con mucha frecuencia, participando en campeonatos formales con el equipo de mi pueblo. Bueno, eso fue hace mucho tiempo. Pero tuve lesiones que me dificultaban la práctica. Mis rodillas aún lo recuerdan y un accidente con un dedo de mi mano derecha, del que perdí una parte al quedar atorado en una malla de nylon, me lo hacen presente. ¿pueden los avances tecnológicos y científicos proveerme de soluciones a mis dolencias? ¿podría tener un remplazo de rodilla o una prótesis inteligente para mi mano? ¿Es la tecnología una herramienta para solventar lo que la naturaleza por sí misma no me puede resolver? ¿Podría tener un remplazo de otros órganos, voluntariamente, solo para hacerlos más durables, más longevos, que me permitan vivir sin problema 100, 200 o 300 años? ¿Podría reemplazar un ojo para ver a mayor distancia, un oído para oír con más detalle?

¿Se acuerdan del programa de los 80’s, “El hombre nuclear”, (en inglés “The Six Million Dollar Man” - "Steve Austin. Astronauta. Su vida está en peligro. Lo reconstruiremos. Poseemos la tecnología para convertirlo en un organismo cibernético, poderoso, superdotado."), que después de un accidente tuvo un ojo, un brazo y sus piernas super poderosas?. De niño, todos en mi escuela, “éramos” el hombre biónico. ¿Piensas que eso es posible? ¿Y si fuera posible cuánto estarían dispuestos a dar por ello?

Precisamente estas son las respuestas planteadas por los Transhumanistas. Plantea en “extremis” el sueño, me parece a mí: natural, permanente y reiterativo en el tiempo, del ser humano a eternizarse, en automejorarse y ahora, más que siempre, profundamente revestido del poder de la tecnología (no hablo solo de TIC’s), en el sentido más amplio posible de lo que se considera tecnología, acariciando con interés la ciencia, la biología, cibernética y genética.

H+ pregona la fusión (completa, no como simples anexos, sino integración bio-tecnológica) entre “lo humano” y “lo tecnológico”, aumentando, incrementando las capacidades actuales (evolutivas actuales) que tenemos los seres humanos, produciendo un nuevo ser (transición) que rompe las barreras físicas y limitaciones temporales, para acelerar su evolución (lenta y a poquitos) a nuevos y extraordinarios niveles del ser (acelerada y amplia). Seremos más que humanos: Posthumanos.

Les presento esta introducción, tratando de provocarlos a acompañarme en un viaje de varias entregas en donde haré una aproximación investigativa, más profunda de lo usualmente publicado en Internet, sobre conceptos de Transhumanismo, Singularidad, Posthumanismo, terminando con un aterrizaje en filosofía y ética. Desde Huxley y FM 2030 (Esfandiary), pasando por el “Übermensch” de Nietzsche, hasta descender en la Inteligencia Artificial, Robótica, Genoma Humano y Nanotecnología.

Los invito a acompañarme e inscríbanse a mi blog, para avisarles de las entregas que iré haciendo, les aseguro que será un viaje de aprendizaje y discusión. No se lo pueden perder.

Saludos a todos, humanos aún.

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